Nos roban
Usted seguro conoce la sensación. Si vive hace tiempo en este país no debe ser la primera vez que experimenta el amargo trago de estafado en sus propias narices. Al igual que con el alcohol fuerte, con el correr de los tragos ya no molesta tanto.
¿Qué quiero decir con esto? Que una vez más, con la estatización de las jubilaciones, nos van a robar; y probablemente, embriagados como estamos, no sintamos pasar el trago. El problema llegará cuando ese trago, sumado a los anteriores, nos haga efecto y nos deje muertos, borrachos de ser estafados, y vomitando pestes.
(Continuara...)